Es común que en un negocio, en el momento de hacer números, se confunda lo económico con lo financiero. Al final del día, y después  de hacer la caja diaria, se suele escuchar: “Hoy me fue bien” u “hoy me fue mal”, todo en función a la cantidad de dinero que hay en el cierre de la caja de ese día. Pero cabe destacar, que el hacer la caja no mide si la empresa gana o pierde, sólo determina la posición financiera (diaria en este caso) que tenemos.

Vayamos por partes…  Cuando nos referimos a “lo económico”, estamos haciendo alusión a si la empresa gana o pierde. Y para saber esto, debemos hacer la siguiente operación:

Resultado económico = (Ventas – Costes) + (Otros ingresos –Otros gastos)

Si al final el resultado es positivo, entonces la empresa habrá ganado. En cambio, si el resultado es negativo, la empresa habrá perdido. Pero no debemos dejar de destacar que este análisis tiene que ver con las operaciones concretas, independientemente del momento del pago o del cobro de las mismas. Se rige bajo el criterio de lo devengado (es decir, se computa una vez acordado el negocio, ya sea con la factura o con el envío y NO cuando se paga o se cobra).  Esto quiere decir que un negocio puede ser rentable pero financieramente inviable. Sigamos avanzando para comprender esto mejor…

En cambio, en “lo financiero” estamos haciendo alusión a los ingresos y pagos de caja, que está directamente ligado al momento en que se realizan. Lo que en definitiva termina mostrando la posición financiera de la empresa:

Resultado financiero = Ingresos – Pagos

Para despejar las dudas veamos un simple ejemplo:

Durante el mes 1, vendemos a un cliente mercancías por un total de 1.000,00 €. El coste total de este producto para la empresa es de 600,00 €. Pero anotamos que, para poder efectuar esta operación y en estas condiciones, la empresa ha de pagar al proveedor al contado y acordó con el cliente un cobro a 90 días. A partir de estos datos podemos analizar ambas situaciones de la siguiente forma:

Situación Económica

Mes 1
Ventas  1.000,00
Costo    -600,00
Resultado     400,00

La rentabilidad es de un 40%, por lo que el negocio es económicamente viable por su margen/rentabilidad.

Situación financiera

Mes 1 2 3
Ventas  0,00 0,00  1.000,00
Costo     -600,00 0,00         0,00
Resultado     -600,00 0,00  1.000,00

Estos últimos datos nos demuestran que, para poder hacer el negocio, debemos tener 600,00 € disponibles el primer mes. Ahora la pregunta es: ¿ dispongo de los 600,00 € el primer mes como para poder realizar la venta de los 1.000,00 € ?. Si la respuesta es NO y no puedo conseguir con  ningún tipo de financiación estos 600,00, por más que el negocio sea bueno (rentable), no podemos hacerlo. Además, si contemplamos la situación de que, incluso antes de cobrar la primera vez del cliente, tenemos que reabastecerlo, deberíamos tener clara la cifra exacta de la que deberíamos disponer para realizar el negocio (insisto, independientemente de que el negocio sea rentable).

Después de lo expuesto de manera tan simplista sólo queda destacar la importancia que tiene para cualquier empresario saber distinguir entre “lo económico” y “lo financiero».